Capítulo 54

Agustina entró a la habitación de los chicos, pero al único que vio fue a Bruno

Bruno: Si lo buscas a Manuel, no está acá.

Agus: Si, ya me di cuenta. ¿A vos que te pasa?

Bruno: Nada, tengo sueño

Agus: Supongamos que te creo.

Bruno: ¿Tan mal miento?

Agus: Demasiado. Yo sé que te va a hacer sentir mejor. Pero me vas a tener que ayudar

Bruno: Se viene una de tus bromas ¿No?

Agus: Si, podríamos llamarla así.

Minutos después

Agus: Thiago, Ori te llama

Thiago: ¿Dónde está?

Agus: Está en su cama

Thiago se dirigió hacia la habitación, mientras Agustina lo seguía por detrás. Al ver a Oriana en su cama, comenzó a caminar hacia ella. Pero antes de que pudiera decir algo, Bruno salió con un grito desde bajo las sabanas con la que estaba tapado. Thiago se asustó demasiado, ya que era lo último que esperaba encontrar en la cama de su novia. Agustina y Bruno no paraban de reír.

Ori: Que pasó? – dijo entrando a la habitación tras escuchar los gritos y las risas – Bruno, ¿Qué haces en mi cama?

Thiago: Estaba por preguntar exactamente lo mismo. Me asustaste tarado

Bruno: Era la idea. Ahora sí, me retiro – dijo todavía riendo

Thiago: A vos te voy a matar – dijo mirando a Agustina

Agus: Por? Yo no hice nada – dijo con total inocencia

Thiago: Si no viniera de vos, me la hubiera creído

Agus: Gracias

Ori: Se puede saber que le hicieron ahora?

Pero antes de que Agustina pudiera contestar Thiago lo hizo

Thiago: Casi me dan un infarto, eso hicieron

Agus: Bueno, tampoco fue para tanto

Thiago: Si fue. Pensé que era ella la que estaba en su cama, como debería ser

Agus: Lo que pasa es que vos sos una víctima muy fácil. ¿Por qué ella iba a estar acostada en su cama, tapada y con la luz apagada?

Thiago: Que se yo, pero ustedes me dijeron que me estaba llamando. Lo último que iba a pensar es que era una broma

Ori: Viniendo de ella creo que ya tendrías que darte cuenta

Thiago: Claro, ahora yo tengo la culpa

Agus: Y si, la verdad es que sos bastante tarado

Ori: ¡Agustina! – gritó

Agus: ¿Qué pasa?! No grites así¡Me asustaste!
Thiago: Vos a mi también!

Ori: No le digas así! Yo no quise decir eso!

Agus: No, pero lo pensaste

Ori: Ahora lees mentes también

Agus: No es muy difícil saberlo

Ori: Basta. Encima que lo asustas, le decís cosas

Agus: Defendete solo, Rubia

Ori: No me voy a cansar nunca de decírtelo: sos tan mala cuando querés…

Capítulo 53

Fran: Bruno – dijo moviéndolo suavemente

Bruno abrió los ojos un tanto confundido

Bruno: que pasa?

Fran: te quedaste dormido, vení a comer

Bruno: ya voy

Fran: Bruno, yo te quería agradecer por lo de hoy. Estaba con las chicas y después te vi dormido,  no quería despertarte. Pero gracias, enserio

Bruno: de nada

Fran: te molesta si te pregunto porque le pegaste? Por qué me defendiste?

Bruno: se lo merecía por tarado

Bruno no quiso agregar más nada. Una vez más, se había quedado con las ganas de decirle lo que sentía. Pero al mismo tiempo se sentía aliviado de que todo haya sido un sueño. Por otro lado, Francesca, intentó ocultar su decepción ante no escuchar la respuesta que tanto anhelaba.

Luego de comer Bruno y Thiago estaban en la habitación

Thiago: Bruno, que te pasa? –preguntó al notarlo más disperso de lo normal

Bruno: nada

Thiago: dale, no me mientas que te conozco

Bruno: no sé qué me pasa, soñé con Fran

Thiago: que soñaste?

Bruno: estábamos hablando de lo que pasó hoy a la tarde y cuando yo le dije lo que sentía por ella me trató muy mal. Me decía que ella no sentía lo mismo y que nunca íbamos a estar juntos. Fue demasiado real

Thiago: te está matando, eso te pasa

Bruno: nunca la vi así, siempre fue una más

Thiago: vos lo dijiste, fue. Las cosas cambian, Bruno

Bruno: sea lo que sea no pienso hacer nada. Algún día se me va a pasar

Thiago: vos te estás escuchando? Deja de hacerte el duro y decile lo que sentís, porque cuando ya no puedas más va a ser tarde

Bruno: no sirve de nada que lo sienta uno solo, Thiago

Thiago: y vos que sabes lo que ella siente? Le preguntaste?

Bruno: no, pero…

Thiago: pero nada – lo interrumpió – ya lo hiciste antes

Bruno: si, pero esta es la primera vez que tengo miedo. Con ella es distinto, porque con las demás nunca lo sentía enserio. Si me rechazaban me daba igual.

Thiago: nunca te vi así

Bruno: así como?

Thiago: hablando de tus sentimientos

Bruno: le contás a alguien y te mato

Thiago: me gustaba más cuando hablabas del amor en lugar de amenazarme

Bruno rió

Thiago: igual esta en vos, yo no puedo obligarte. El amor se persigue, no cae del cielo

Thiago se retiró de la habitación y deja que Bruno pudiera quedarse a solas con él mismo. Sintió que lo necesitaba, después de todo lo conocía demasiado

Capítulo 52

Agustina y Francesca entraron a la casa

Agus: Estás segura que estás bien?

Fran: si, enserio. Lo que no entiendo es porque Bruno se puso así

Agus: no sé, eso se lo tendrías que preguntar a él

Ori: de que hablan? Qué pasó?

Fran: estaba por ir al agua con Bruno y de la nada me frena un chico y no me dejaba irme

Agus: Bruno le pegó

Thiago: qué? Donde está Bruno ahora?

Agus: no sé, estaban viniendo con Manu

Ori: el chico le hiso algo?

Fran: no, porque Bruno le pegó tan fuerte que lo tumbó al piso. Manu lo tuvo que frenar

Thiago: cuando va a ser el día que aprenda a controlarse – suspiró

Agus: igual se lo tenía merecido

Después de un rato, Bruno estaba buscando a Francesca para hablar con ella

Bruno: Fran, estas bien?

Fran: si, gracias

Bruno: no me tenés que agradecer nada – dijo sonriendo

Fran: Bruno, te puedo preguntar algo?

Bruno: si, decime

Fran: por qué lo hiciste? Por qué me defendiste?

Bruno: no podía dejar que te trate así

Fran: igual no necesitaba que me defiendas, y menos de esa forma – dijo de mala manera

Bruno: pero yo…

Fran: vos nada – lo interrumpió – no me gusta la violencia

Bruno: que querías que haga?

Fran: que me dejaras con él, yo puedo sola

Bruno: Fran, que te pasa?

Fran: a vos que te pasa? no me gusta que te metas en mi vida, Bruno

Bruno: sabes que me pasa? Me gustas mucho Francesca, eso me pasa – dijo algo molesto

Fran: yo no siento lo mismo por vos, lo nuestro nunca va a pasar. Entendélo – dijo casi gritando – yo no elijo mis sentimientos, no te veo de la misma forma que me ves vos

Una lágrima resbaló por la mejilla de Bruno, quien la ocultó rápidamente

Bruno: sabés qué? tenés razón. Yo me confundí, perdóname

Bruno bajo la cabeza, dio media vuelta y se fue sin decir nada

Capítulo 51

Thiago despertó antes que Oriana y al verla dormir con tanta paz, se acostó con cuidado a su lado. No pasó mucho tiempo para que ella despertara y lo primero que hiciera fuera sonreír al verlo.

Thiago: Como te sentís, hermosa?

Ori: bien, gracias por cuidarme

Thiago: no me tenés que agradecer nada, lo hago porque te amo

Ori: yo también te amo. Sos perfecto

Thiago: vos sos perfecta, mi amor

Ambos se miraron sonriendo y se quedaron abrazados por un rato

A la tarde Manuel, Bruno, Francesca y Agustina estaban en la playa. Oriana prefirió todavía quedarse adentro y Thiago decidió quedarse con ella, así que miraron una película. Manuel y Agustina estaban en unas reposeras más alejadas y Francesca estaba sola desde hacía unos minutos, cuando Bruno había decidido ir al agua. Unos minutos después Francesca se puso de pie para ir con él y mientras caminaba un chico la interceptó tomándola del brazo

-Hola hermosa

Francesca lo miró algo sorprendida

Fran: creo que te confundiste de persona – dijo intentando evadirlo

-No, créeme que no. Justo a vos te estaba buscando

Fran: a mí? Ni siquiera nos conocemos

-A mí eso no me cambia en nada, vas a venir a tomar algo conmigo. Yo invito

Fran: no, gracias

-Es que no te lo pregunté

Fran: no, enserio. No quiero. Me podes soltar? – dijo mirando su mano tomándola del brazo

-Estás segura que  no querés venir? No sabes de lo que te estás perdiendo

Francesca lo miró con desprecio

Fran: veo que sos humilde también – dijo notoriamente sarcástica

-Y vos graciosa – contestó en el mismo tono

Fran: enserio, me quiero ir

Bruno hacía rato que los observaba desde el agua y fue entonces que comenzó a dirigirse hacia ellos

-Si, pero no te vas a ir si no es conmigo. Ni siquiera me dijiste tu nombre

Pero antes de que Francesca llegara a contestar, Bruno apareció de la nada

Bruno: te está diciendo que la sueltes, idiota

-Para, y vos quien te crees que sos? Desaparece de acá

Dicho esto, Bruno le atinó un fuerte golpe en la mejilla, derribándolo al suelo. Manuel, al escuchar el golpe, corrió rápidamente hacia él, alejándolo. Sabía que Bruno no iba a parar hasta matarlo

Manu: Bruno calmate, que pasó?

Agustina acompañó a Francesca lejos de esa escena

Bruno: es un enfermo, eso pasa

Manu: tranquilízate, vamos adentro

Bruno lo miró unos segundos, amenazándolo solo con la mirada, hasta que Manuel logró llevárselo de allí

Capítulo 50

Bruno: cuanto nos falta para volver?

Manu: no sé, pero no es mucho

Fran: yo extraño a todos, me gusta estar acá pero ya pasó mucho tiempo

Agus: apenas pasó un mes

Fran: un mes es mucho para mí

Agus: para mí no, yo me podría quedar toda la vida

Fran: sin ver a nadie? Ni siquiera a tu mamá?

Agustina lo pensó por unos segundos

Agus: si, para qué la querés?

Fran: porque es tu mamá. A veces parece que no la querés

Agus: yo sí la quiero, como vos dijiste es mi mamá. Pero no me pidas que la extrañe todo el tiempo

Bruno: ni siquiera a tus hermanos extrañas? Ni a tu papá?

Agus: es igual que con mi mamá. Si estoy con ellos está todo bien, y si no también

Agustina tenía dos hermanos de 16 años, que por cierto eran mellizos. Julieta era con la que más peleaba. La verdad era que a ella le gustaba bastante molestarla, tenían personalidades muy distintas. A su hermana le encantaba  la moda y todo lo que venía con ella. No salía a ningún lado sencilla. Agustina era todo lo contrario, era muy simple. Le gustaba mucho el futbol y la música, aunque a esta última no la compartía con nadie. Era muy tímida en ese sentido. Su hermano Marcos era su aliado perfecto, lo que no lo mantenía fuera de ser una de sus víctimas. Pero de todas formas les gustaba estar juntos siempre que podían. Oriana era todo lo contrario. Tenía una hermana un año menor que ella, llamada Delfina, y se llevaban a la perfección. Al  tener tan poca diferencia de edad eran muy amigas y se contaban todo. Oriana amaba bailar y de cierta forma le había transmitido eso a su hermana.

Thiago era el único de los seis que no tenía hermanos, pero lo sentía a Bruno como si lo fuera. La primera vez que se vieron fue a los seis años, pero su relación comenzó por una pelea, seguían riendo cada vez que recordaban ese día. En cambio, entre Thiago y Oriana, todo había comenzado muy distinto. La primera vez que se vieron había sido unos de los primeros días de secundaria, aunque luego de que los cursos se dividieran y fueran separados, no se veían casi nunca. Pero después de eso Oriana no paraba de hablar de él. Tanto que Agustina había tenido que acostumbrarse a ello. Al armar los cursos, una extrovertida Francesca Galván había entrado en sus vidas para no irse. No les había costado mucho hacerse amigas, pero se lo atribuían todo a ella, que desde el momento en que se sentó justo delante de Agustina y Oriana no hacía más que hablar toda la clase. Pero nada había sido en vano. Lo mismo pasó entre los seis. Pero demás está decir que Manuel, Thiago y  Bruno no se hicieron amigos de la nada. Todo ocurrió uno de los primeros días de clase. Todos los varones estaban en gimnasia. Hacia demasiado calor como para jugar al futbol, pero sin embargo lo estaban haciendo.  Manuel y  Thiago, que aún no se conocían, estaban  en el mismo equipo.  Uno de los nuevos era el típico “malo” y a Manuel, como a muchos otros, le cayó mal desde el principio. En medio del partido y totalmente de la nada, derribó a Thiago al piso demasiado fuerte. Manuel, quien no toleraba a las personas como él, lo defendió sin pensarlo dos veces y enseguida se le sumó Bruno. Desde entonces estaban juntos siempre. Tanto Thiago como Bruno apreciaban mucho que se hubiera animado a hacer algo que ninguno había tenido el valor de hacer: enfrentarlo

Unos años más tarde, surgió la propuesta del  viaje. Estaban ya en los últimos años de escuela cuando tuvieron que comenzar a decidir, entre los dos cursos, el destino del tan ansiado viaje de egresados, pero ocurrió un problema: no lograban ponerse de acuerdo. Después de eso, los cursos habían quedado demasiado divididos, por lo que decidieron que era mejor hacerlo por su cuenta. Así fue que pusieron en marcha su plan. Y lo habían logrado

Capítulo 49

En los comentarios de este capítulo, puede dejar preguntas sobre cosas que quieran saber acerca de los personajes: sus vidas, su familia, algo que les haya pasado, etc. Todas las preguntas que hagan van a ser respondidas en el capítulo 50, siempre y cuando no sea algo que vaya a pasar mas adelante. Gracias!

Thiago se despertó dos veces en el transcurso de la noche, pero se volvía a dormir tranquilo al comprobar que la fiebre no había vuelto a aparecer en Oriana.

Eran las once cuando Bruno, que había sido el primero en dormirse, despertó. Todos seguían durmiendo pero sin embargo no entendía porqué Thiago no estaba en su cama y porqué Agustina estaba con Manuel. Fue hasta la pieza de las chicas y vio a Thiago en la cama de Agustina. ¿De qué se había perdido? Bruno se dirigió fuera del sector de habitaciones y se sentó en el sillón a ver televisión ya que todos dormían y no había nada que hacer. Después de unos diez minutos Francesca también despertó.

Fran: hola – dijo sentándose con él en el sillón

Bruno: buenos días

Fran: está demasiado tranquilo todo esto. Es raro

Bruno: si, la verdad que sí. Nunca me había levantado primero. Igual no creo que dure mucho

Fran: no, yo tampoco lo creo

Bruno: Thiago durmió toda la noche con ustedes?

Fran: sí. Se quiso quedar con Ori, así que cambiaron de cama con Agus. Ella se fue a tu pieza. Pero creo que ya te habrás dado cuenta de eso

Bruno: si, la vi. Pero no cambiaron de cama exactamente porqué ella está durmiendo en la cama de Manuel

Fran: y él entonces?

Bruno: yo nunca dije que Manuel se haya ido a otra cama

Ambos rieron

Después de un rato Agustina y Manuel también despertaron. Fueron con Bruno y Francesca

Bruno: viste? Yo te dije que no iba a durar por mucho tiempo la tranquilidad – dijo dirigiéndose a Francesca

Agus: herís mis sentimientos Bruno – dijo sarcásticamente

Fran: recién se levantan y ya empezaron? Antes de que digan algo, no empiecen a echarse la culpa porque no la terminan más. Mejor no digan nada

Agus: Ori sigue durmiendo?

Fran: me parece que si

Agus: qué raro, se durmió temprano

Fran: si, pero cuando tenés fiebre te cansas más de lo normal. Igual yo creo que Thiago va a ser el último en despertarse. Se despertó dos veces anoche a ver como estaba Ori

Bruno: ya me voy a levantar – dijo sarcástico

Fran: Bruno! Si es tu novia se supone que la amas, y si la amas harías cualquier cosa porque este bien!

Manuel: esta vez la voy a apoyar a Fran

Agustina lo miró y no pudo evitar sonreír

Bruno: vos lo decís porque la tenés a ella al lado – dijo señalando a Agustina – no sabes lo que dijo anoche, Agus

Agustina lo miró a Manuel y luego volvió su vista a Bruno

Manu: yo no dije nada

Agus: no dijo nada porque no sabe mentir en esas cosas. Lo dijo con demasiada tranquilidad

Manuel miró a Bruno como haciendole burla

Fran: Bruno no seas malo. Deja de intentar hacer que se peleen

Bruno rió y enseguida se sumaron los demás

Capítulo 48

Al día siguiente después de almorzar, estuvieron toda la tarde en la playa. Eran cerca de las ocho de la noche cuando decidieron volver. Thiago se bañó y se dirigió a la cocina para comenzar con la cena. Después de un rato, Oriana fue con él.

Thiago: Ori, te sentís bien?

Ori: si, me duele un poco la cabeza. Nada más

Thiago: porque no te acostás un rato, hermosa?

Ori: no, me quiero quedar acá con vos. Solo me voy a buscar una campera porque tengo frío

Thiago: dale

A Thiago le llamó la atención que Oriana tuviese frío. A pesar de que ya era de noche el clima seguía siendo muy cálido. Oriana regresó y se sentó en una silla cerca de Thiago

Ori: querés que te ayude en algo?

Thiago: no, está bien. Seguís teniendo frío?

Ori: un poco, pero ya se me va a pasar

Thiago: vení - le dijo haciéndole señas. Cuando Oriana se puso de pie, la abrazó envolviéndola por completo con sus brazos y apoyando su cabeza en la de ella – Estás hirviendo, Ori. Creo que tenés fiebre. Vení conmigo – dijo tomándola de la mano y llevándola fuera de la cocina

Fueron hasta la habitación de Oriana y ella se sentó en su cama

Thiago: esperame acá que voy a ver si encuentro un termómetro

Thiago fue a buscar el botiquín y tuvo suerte de hallar un termómetro dentro. Volvió a la habitación y le colocó el termómetro bajo el brazo

Thiago: tenés fiebre, mi vida. Acostáte que yo ya vengo

Thiago fue a buscar a Agustina, quien estaba sentada en el sillón con Manuel.

Thiago: Agus, perdón que los moleste pero Ori tiene fiebre.

Agus: querés que vaya con ella?

Thiago: no, yo me quedo con ella. Pero deje la comida en el fuego y se va a quemar

Agus: bueno, yo cocino. No te preocupes

Thiago: gracias

Agustina sonrió. Oriana tenía suerte de tenerlo a su lado. Manuel la acompañó a la cocina. Thiago tomó una fuente, le puso algunos hielos y la llenó con agua. Buscó algunos paños y se dirigió a la habitación.

Thiago: Ori, no te tapes. Yo sé que tenés frío, pero si te tapas va a ser peor

Oriana asintió y se destapó hasta las piernas

Thiago: traje esto para intentar que te baje la fiebre

Thiago se sentó a un lado de Oriana, sumergió uno de los paños en el agua fría y levantándole la remera, se lo colocó sobre la panza. Después de un rato Agustina avisó que la cena estaba lista,  y luego de que Oriana le insistiera, Thiago su fue a comer. De todas formas no tardó mucho en volver

Thiago: tenés hambre? Queres que te traiga algo?

Ori: no, gracias. Estoy bien, enserio. No te preocupes. Anda a hacer algo. No quiero que te quedes acá por mi culpa

Thiago: me quedo porque yo quiero. De lo único que tenés la culpa es de volverme loco

Ori: te amo – dijo sonriendo

Thiago: yo también

Thiago la besó, pero Oriana lo apartó enseguida

Ori: mi amor, te vas a contagiar

Thiago: mejor. Sería la excusa perfecta para quedarme con vos todo el tiempo

Ori: no, porque entonces alguien tendría que venir a cuidarnos

Thiago: Tenés razón. Yo solamente puedo cuidarte a vos. Nadie más

Ori: yo no quiero que me cuide nadie más que vos

Thiago le sonrió

Thiago: deberías dormir. Te va a hacer bien. Yo me voy a quedar a hasta que la fiebre se te baje por completo.

Ori: no, mi vida. Vos también tenés que dormir

Thiago: te puede subir la fiebre mientras duermas

Ori: no me va a pasar nada, de verdad

Thiago: y si me quiero quedar con vos?

Ori: si queres quédate acá hasta que me duerma, pero después anda a dormir vos también. Te va a hacer mal quedarte toda la noche despierto

Thiago: bueno, está bien

Thiago se quedó a su lado. No llevó mucho tiempo para que Oriana se durmiera. Después de un rato Agustina y Francesca, que eran las únicas que quedaban despiertas, fueron a acostarse.

Agus: Thiago, vos te pensás quedar ahí toda la noche?

Thiago: si, aunque ella no quiera

Agus: si querés te dejo mi cama para que te acuestes, yo me voy a la tuya

Thiago: enserio?

Agus: si, enserio. Pero no me abraces

Thiago rió. Agustina se fue a la otra pieza y Thiago se quedó cambiándole los paños un rato más a Oriana hasta que comprobó que la fiebre se había ido. Entonces decidió acostarse.

Manu: Agus, que haces acá?

Agus: Thiago se quería quedar con Ori, entonces le deje mi cama

Manu: te vas a quedar a dormir?

Agus: no, vine a dar una vuelta – dijo sarcástica

Manuel rió

Manu: ahora por mala vas a tener que pagar

Agus: ah sí?

Manu: sí

Agus: y como te pago?

Manu: te vas a quedar toda la noche acá conmigo – dijo dejándole lugar en su cama

Agustina rió y se acostó a su lado. 

Capítulo 47

Bruno: y si para hoy a la noche alquilamos alguna película?

Agus: mientras no sea de terror todo bien

Ori: eso

Manu: pero son las más divertidas. Total estamos los seis juntos, no va a pasar nada. Si queres después venís a dormir conmigo – le dijo a Agustina

Ori: si dale, aprovechá vos nomás

Los seis rieron

Thiago: hay que encontrar algún lugar

Fran: si, pero no vamos a ir los seis

Agus: yo voy

Manu: yo también

Bruno: yo los acompaño

Agus: listo, vamos nosotros tres

Manu: mientras tanto ustedes se quedan acá y limpian todo esto

Ori: sí, claro. Limpiamos y después se van, negros

Agus: Ei pará. Que acá el único negro es el – dijo señalando a Bruno

Thiago: ponele

Bruno: te dijeron negra – dijo haciéndole burla a Agustina

Ori: por favor les pido que no empiecen de nuevo

Terminaron de comer y limpiaron todo. Bruno, Manuel y Agustina se dirigieron al centro para ver si encontraban algún lugar donde alquilar la película. De todas formas no les llevo mucho tiempo. Encontraron un lugar enorme y decidieron entrar

Bruno: que llevamos?

Agus: yo sé de una que me dijeron que da mucho miedo, pero no sé si quiero verla

Manu: dale, vamos a llevar esa

Agus: se llama “Los mensajeros”. Es bastante vieja igual

Bruno: vamos a buscarla. Pero fíjense que este subtitulada en español

Manu: cómo vamos a saber eso?

Bruno: leyendo la parte de atrás de la caja

Se separaron para encontrar la película y cuando lo hicieron volvieron a la casa. Estuvieron toda la tarde en la playa y después de cenar acomodaron todo para verla. Pero había un solo sillón y eran seis. Thiago se sentó en el sillón y Oriana se sentó sobre él. Bruno y Francesca aprovecharon que llegaron antes que Manuel y Agustina y se sentaron en los dos lugares que quedaban. Cuando estos últimos llegaron y vieron que no quedaba más lugar no les quedó otra que sentarse en el piso. Agustina se sentó sobre un almohadón en “chinito” y se apoyó en las piernas de Bruno. Manuel se acostó en el piso y apoyó la cabeza en las piernas de su novia. La película transcurrió entre gritos de Oriana y Francesca cada vez que se asustaban, peleas entre Bruno y Agustina porque él no dejaba las piernas quietas y como si fuera poco, justo antes de que la película termine, se cortó la luz

Fran: que pasó?

Agus: apagué la luz, colorada – dijo sarcástica – se cortó la luz

Bruno: y ahora?

Agus: yo no pienso moverme

Manu: Thiago, acompañame a buscar el farol

Thiago: si, vamos

Cuando encontraron el farol, se pusieron a buscar el panel que controlaba la luz, porque al parecer era solo en la casa.

Agus: alguno sabe cómo hacer?

Manu: no sé, vamos a probar

Ori: tengan cuidado, faltaría que se electrocuten

Manuel comenzó a tocar todas las teclas que encontró, hasta que una encendió las luces nuevamente.

Fran: vamos a seguir viéndola que quiero saber cómo termina

Bruno: dale, pero nos sentamos todos en el mismo lugar de antes, porque yo ya se lo que van a hacer ustedes dos – les dijo a Manuel y a Agustina

Manu: siempre nosotros

Ori: por qué será?

Agus: no tengo idea
Manu: yo menos

Capítulo 46

Manuel y Agustina llegaron del mercado y fueron a dejar las bolsas en la cocina, donde Thiago y Oriana estaban hablando

Ori: trajeron todo?

Agus: si, te íbamos a traer una vieja también pero no quiso venir, se enojó

Agustina y Manuel comenzaron a reír al recordar lo que había pasado

Ori: que hicieron ahora?

Agus: que hiso mejor dicho. Yo no tuve nada que ver esta vez

Thiago: va a llover

Agus: ojalá, así se te rompe la madera de nuevo

Ori: Agustina!! No le digas esas cosas

Agus: para que me pelea

Thiago: vos sos la que me pelea siempre

Agus: vos me provocas

Ori: cortala Agus!

Agus: porqué me retas a mi sola? Él la empezó esta vez

Ori: porque él no te dice ni la mitad de las cosas que vos le decís a él

Thiago: ves? La mala acá sos vos, acéptalo

Agus: prefiero ser mala antes que ser tarada

Ori: basta! Los dos! Manuel que hiciste?

Manu: atropellé a una vieja con el carrito del supermercado

Los cuatro comenzaron a reír inevitablemente. En ese momento Bruno y Francesca entraron a la cocina

Fran: de que se ríen?

Manu: nada, no importa

Thiago: pongan la mesa así comemos

Agus: a ellos dos les toca - dijo señalando a Bruno y Francesca

Bruno: porqué nosotros?

Agus: porque nosotros fuimos al mercado, negro

Manu: exacto, negro

Fran: basta, dejen de decirle asi

Bruno: paren, porque ustedes son Aurora y el príncipe Felipe

Agus: me gusta más la cenicienta pero bueno, te perdono

Bruno: yo no

Agus: que negro ortiva

Fran: basta Agustina, deja de decirle esas cosas

Ori: si, la verdad que te levantaste más peleadora de lo normal

Agus: bueno, perdón ne… Bruno

Thiago: pueden poner la mesa!?

Agus: bueno rubio, traquilizate

En ese momento quedaron solo Oriana, Thiago y Agustina en la cocina

Thiago: no empieces de nuevo

Agus: sabes que te jodo, no te enojes Thiaguito

Thiago: no me digas así, Agustinita – dijo haciéndole burla

Ori: no se para que le contestás, Thiago

Agus: te retaron

Thiago: me dijo que te ignore

Ori: me cansaron los dos

Thiago: bueno, perdón

Thiago se acercó y abrazó a Agustina

Agus: bueno, tampoco la emoción. Me podes soltar?

Thiago: no, porque sé que te gusta que te abracen – dijo sarcásticamente

Ori: desde cuando están tan peleador vos? Dale, soltala y córtenla que parecen dos nenitos de cinco años

Agus: si, hace caso nene

 Oriana lo agarró a Thiago del brazo y se lo llevó de la cocina para que dejaran de pelear. Agustina los siguió y se sentaron a comer

Capítulo 45

Al despertar a la mañana siguiente Manuel y Agustina fueron al supermercado a comprar comida y otras cosas que necesitaban. Pero no porque ellos quisieran, sino porque los obligaron a hacerlo. Así que después de quejarse por un rato no les quedó más que ir.

Llegaron al mercado con una lista larguísima de cosas que hacían falta y decidieron separarse para hacer más rápido. Cuando se volvieron a encontrar, Manuel no paraba de reír

Agus: de que te reis? Qué pasó?

Pero Manuel no podía ni respirar

Agus: Ei! Que hiciste?

Pero Manuel seguía sin contestar por reírse y Agustina comenzó a reír también. Cuando él logró calmarse, respiró profundo

Agus: ahora si me podés contar?

Manu: venía trayendo el carrito y cuando doble en una góndola atropellé a una vieja

Los dos comenzaron a reír todavía más fuerte y sin poder parar. Estaban literalmente llorando de la risa. La gente que pasaba por al lado de ellos los miraba extrañada.

Agus: le pediste perdón por lo menos?

Manu: no me entiende, además creo que se enojó

Ambos empezaron a reír nuevamente

Agus: espero que no nos la crucemos más. Vamos a buscar lo demás que nos falta poco

Manu: vamos

Cuando llego su turno en la caja, Manuel hacia esfuerzo para intentar entender lo que le decía el cajero, ya que él tenía que pagarle. Manuel la miró a Agustina, quien intentaba ocultar la risa. Se repartieron las bolsas para llevarlas y emprendieron el regreso

Manu: de que te reías?

Agus: de vos

Manu: que viva, le hubieras pagado vos

Agus: y porque no te fijaste en la pantalla de la computadora?

Manuel comenzó a reír

Manu: porqué no me avisas antes?

Agus: porque si te abría la boca en ese momento era para reírme y el de la caja iba a pensar que me reía de él. No me quería ganar dos enemigos en un mismo día

Ambos rieron

Manu: no la choqué a propósito, te juro que no la vi

Agus: si te creo. Pero igual me causa gracia

Manu: podes llevar las bolsas? Si no dámelas

Agus: no, está bien. Vos ya tenés dos en cada mano, te vas a hacer mal. Encima agarraste las más pesadas

Manu: no iba a dejar que las lleves, Agus

Thiago estaba cocinando y Oriana estaba con él en la cocina

Ori: Manu les contó anoche?

Thiago: si, vos ya lo sabias no?

Ori: si, me había contado Agus la noche anterior

Thiago: Agus te contó? Qué raro

Ori: bueno, en realidad no fue tan así

Thiago: ya me parecía raro que salga de ella

Ori: y al final lo logramos

Thiago: que logramos?

Ori: unirlos, como habíamos dicho en el viaje

Thiago: no creo que igual hayamos tenido mucho que ver

Ori: la verdad que no

Ambos rieron

Ori: per bueno, están juntos

Thiago: si, y aunque nos quejemos de que molesten les debemos mucho. Tenían lo nuestro tan planeado que asusta

Ori: si, la verdad que no sé cómo hacen. Y no sé qué hubiéramos hecho sin ellos

Thiago: yo creo que solo nos hubiera costado más, o llevado más tiempo. Pero tarde o temprano íbamos a terminar juntos. Me gustaste desde el primer momento en que te vi

Ori: vos a mí también. Agus debió haber estado cansada de escucharme hablar de vos

Thiago: yo no les hablaba de eso a Manuel y a Bruno porque tenía miedo de que te lo dijeran y yo quedara como un tarado. Pero ahora ya no me importa nada porque estamos juntos y te amo

Ori: no! Porque ibas a quedar como un tarado?

Thiago: porque yo nunca me imaginé que vos gustabas de mí. Esas cosas solamente pasaban en mis sueños. Más cerca estábamos los seis, más te conocía y más me gustabas

Oriana lo miró unos segundos, no podía creer lo bueno que era

Ori: yo no lo podía creer. Y sigo sin creerlo. Mira lo que sos

Thiago rió, soltó lo que estaba haciendo y tomándola de la cintura la besó

Capítulo 44

Después de un par de horas que volaron entre charlas y música entraron a la casa para irse a dormir. Cuando ya todos estaban acostados Manuel fue hasta la pieza de las chicas

Manu: Agus, les puedo contar a Thiago y Bruno?

Fran: contar qué?

Manu: perdón, me olvidé que ella no sabía nada

Fran: nada de qué?!

Agus: ay colorada pará un poco!

Oriana rió

Agus: sí, contales. No importa

Fran: contarles que!?

Agus: vení Manu, vamos al pasillo

Manuel la siguió

Agus: no se puede hablar con Francesca gritando así

Fran: Agustina que mala! Te estoy escuchando!

Agus: bueno, tapate los oídos

Mientras Agustina y Manuel hablaban, Francesca no paraba de hacerle preguntas a Oriana.

Agus: no hacía falta que me preguntes, yo le conté a Ori

Manu: si, pero a lo mejor no querías que sepan nada

Agus: a mí me da vergüenza decirlo enfrente de todos, pero no me molesta que les cuentes. Enserio, no hay problema

Manu: gracias

Agus: gracias por qué?

Manu: por todo – susurró y le dio un beso – y perdón por lo de Fran, no me acordaba que no le habías contado todavía

Agus: dejá de pedirme perdón Manu, tarde o temprano se iba a tener que enterar. No te preocupes, enserio

Manuel le sonrió

Manu: hasta mañana

Esta vez fue Agustina quien sonrió y ambos volvieron a sus habitaciones

Bruno: adonde estabas vos?

Manu: estaba hablando con Agus y antes de que me interrumpan les quiero contar algo

Thiago: qué?

Manu: Agus y yo estamos de novios

Cuando Manuel terminó de decir esa frase, ambos se abalanzaron sobre él. Los tres cayeron al piso causando más estruendo que la vez anterior. Además, esta vez se sumaban las felicitaciones de Bruno y Thiago hacia Manuel

Ori: que fue ese ruido?

Agus: les debe haber dicho

Fran: haber dicho que!

Agus: bueno colorada, estoy de novia con Manu

Fran: ay más tiernos! Yo sabía! Te puedo abrazar?

Agus: no

Fran: me lo imaginé

Las tres rieron

Fran: porque ella sabia y yo no?

Agus: porque Oriana hizo trampa mientras vos dormías

Ori: yo no hice trampa, te lo pregunté nomás

Agus: me hiciste prometer que te iba a responder la pregunta si o si, pero nunca me dijiste que pregunta

Ori: y bueno, sino no me ibas a contestar nunca

Capítulo 43

Ya a la tarde, estaban los seis en la playa sentados en la arena charlando

Ori: que fue todo ese ruido anoche? Igual antes de que me contesten estoy segura de que ustedes dos tuvieron algo que ver – dijo señalando a Manuel y Agustina

Manu: y no te equivocas

Agus: en realidad anoche fue mi culpa, nada más que él estaba despierto y vino a ver qué había pasado

Ori: yo sabía

Fran: pero que pasó

Agus: se me cayó un vaso

Manu: y yo me corté – dijo levantando la mano vendada de la que nadie se había percatado

Bruno: dos accidentes en una semana. Arrancó bien el año – dijo sarcástico

Agus: no entiendo como escuchas todo – le dijo a Oriana

Ori: rompiste un vaso de vidrio en el piso de madera, como queres que no escuche. Encima me estaba por dormir y Manuel no tuvo mejor idea que gritar

Manu: y bueno que queres, me corté

Fran: yo no escuche nada

Thiago: yo tampoco

Bruno: yo menos

Manu: además no sé de qué te quejas. Ustedes nos despertaron hoy a la mañana

Thiago: esa fue Fran

Fran: yo por qué?

Thiago: porque gritaste

Fran: te dije que se me escapó

Todos soltaron una carcajada

Agus: vamos al agua?

Bruno: dale, yo te acompaño

Agustina y Bruno se pusieron de pie y comenzaron a caminar. Agustina empujó a Bruno y comenzó a correr hacia el agua. Bruno rió y empezó a correr también. Agustina llegó primera a la orilla, corrió un poco más adentro y saltó de cabeza al agua, sumergiéndose completa y Bruno la siguió.

Manu: vamos?

Ori: Manuel vos no te podes meter con la mano así

Manu: si no me va a pasar nada, pareces mi vieja

Ori: vos te estas juntando mucho con Agustina

Manuel rió

Manu: dale vamos – insistió

Los cuatro se pusieron de pie y caminaron hasta la orilla

Fran: esta helada – dijo tocándola con el pie

Ori: demasiado

Manu: yo me meto igual, vamos Thiago?

Thiago lo dudó unos segundos, pero luego acompañó a su amigo al agua

Agus: Ori! Colo! Vengan!

Ori: yo me meto, pero vos y Manuel se me alejan. No quiero terminar como la otra vez

Agustina y Manuel rieron al recordar aquel día

Manu: podemos intentar algo?

Agus: que queres hacer?

Manu: una torre humana

Ori: a mí ni me miren

Fran: a mi menos

Manu: Negro, levantá a Agus

Bruno: bueno

Bruno pasó su cabeza por entre las piernas de Agustina, haciendo que esta quede sentada sobre sus hombros

Manu: Thiago, vos levantalos a ellos dos

Thiago: no nos vas a poder levantar a los tres

Manu: déjame probar

Ori: se van a matar

Thiago hizo lo mismo con Bruno

Agus: dale que hace frío acá arriba – dijo bromeando

Manu: cuidado que los levanto – avisó

Manuel se sumergió levantando a las tres. Pero no pasaron muchos segundos para que todos cayeran y comenzaran a reír

Esa noche Bruno se ofreció para hacer asado y cenaron en la playa. Después de comer Manuel buscó su guitarra y todos se sentaron en una ronda en la arena. Disfrutaban escuchar a Manuel tocar la guitarra y aunque le daba vergüenza, terminó cantando gracias a la insistencia de sus amigos. Agustina lo miraba hipnotizada. Después de un rato terminaron cantando todos juntos

Capítulo 42

Agus: te duele?

Manu: Un poco, pero no es nada. Me cuida la mejor enfermera de Brasil

Agus: Sí, pero ni loca estudio medicina

Manu: Igual no te veo como médica, trabajando en una clínica

Agus: No. No soporto que me digan que hacer, y menos soporto a la gente que va al médico por cualquier cosa

Manu: Te va a ir bien a vos como productora

Agus: Eso espero. Vamos a formar un gran equipo con Ori

Manu: las re veo trabajando juntas. Y a Fran como actriz de su programa

Agus: Ella se encarga más de lo romántico. A mi no me va eso

Manu: Ya lo sabía

Agus: Y vos podés ser nuestro músico

Manu: Si me pagás, yo lo hago

Agus: Vamos a trabajar todos juntos. Ori y yo como productoras, vos como músico, Fran actuando, Thiago hace el catering, y a Bruno después vemos dónde lo metemos

Manu: Como guardia de seguridad. El negro espanta a todo el mundo

Agustina rió, y Manuel la siguió unos segundos después

Manu: Va a ser difícil

Agus: Qué?

Manu: Separarnos. Nos vamos a ir a estudiar a lugares diferentes, y no va a ser lo mismo

Agus: No creo que nos separemos. No ahora, después de todo lo que pasamos. Vos los ves a Thiago y Ori distanciados? Es imposible

Manu: Solo a ellos?

Agus: Qué decís?

Manu: Y nosotros? Yo no me quiero separar de vos

Agus: -Bajando la cabeza, y casi susurrando- yo tampoco

Manu: Vamos a hacer lo posible por seguir juntos, sí?

Agus asintió con la cabeza

Agus: Yo sé que a veces parezco muy fría, pero es porque no me salen decir las cosas. Pero no por eso pienses que…

Manu: Qué?

Agus: Que no te quiero

Manu: -Sonriendo- Nunca pensaría eso. Yo también te quiero. Y a mí también me cuesta un poco, pero lo intento

Agus: Estamos bien así.

Manu: Te pido un favor

Agus: Dale

Manu: Si alguna vez nos volvemos tan asquerosos como Oriana y Thiago, dejame

Agus: Prometido

Ambos rieron, y Manuel abrazó más a Agustina. No hizo falta mucho más para que se quedaran completamente dormidos

A la mañana siguiente aún seguían en la hamaca paraguaya, ambos dormidos. Oriana se despertó y vio que Agustina no estaba en su cama

Ori: Fran, Agus ya se despertó?

Fran: no sé, yo me desperté y ya no estaba – dijo desde su cama

Ori: que raro, nunca se despierta antes, y menos se va a levantar

Oriana se levantó y en el pasillo se encontró a Bruno

Bruno: Ori, lo viste a Manuel?

Ori: no, Agus tampoco está en la pieza

Bruno: vamos a buscarlos

Ori: dale

Pero al llegar a la cocina comedor y ver que tampoco estaban tampoco estaban, Bruno salió afuera

Bruno: Ori!

Oriana fue donde estaba Bruno y ambos se miraron

Bruno: los puedo despertar?

Ori: no Bruno, no seas malo. Dejalos. A demás no creo que quieras saber lo que pasa si despertás a Agus

Ambos entraron nuevamente y en la cocina se encontraban Thiago y Francesca.

Fran: los encontraron?

Bruno: si, no es que estén tan lejos tampoco

Thiago y Francesca los miraron confundidos

Thiago: que querés decir?

Bruno: no sé, vayan a ver – dijo señalando la puerta de entrada

Ori: sos malo Bruno

Los tres se dirigieron hacia la puerta y Oriana los siguió

Fran: más tiernos! – gritó al verlos

Oriana le tapó la boca

Thiago: colorada deja de gritar!

Fran: se me escapó, perdón - susurró

Los cuatro hicieron fuerza para contener la risa por lo que había dicho Francesca. Pero no les sirvió de mucho ya que ambos despertaron. Agustina tapó su cara con ambas manos y Manuel intentaba abrir los ojos, pero la luz del sol no se lo permitía. Al ver que habían despertado los cuatro volvieron a entrar a la casa tratando de disimular. Manuel se levantó y entró a la cocina

Manu: se puede saber que hacían los cuatro mirándonos?

Fran: se puede saber que hacían durmiendo los dos ahí?

Manu: no y no me cambies de tema

Fran: es que se veían tan tiernos

Manu: nos estaban espiando

Thiago: bienvenido a mi mundo

Los cinco se sentaron a desayunar y Bruno fue afuera donde Agustina seguía en la hamaca paraguaya con los ojos cerrados

Bruno: Agus no venís a desayunar?

Agus: raja de acá negro! No me jodas!

Bruno volvió adentro

Bruno: escucharon lo que me dijo?

Ori: yo te lo advertí

Bruno: menos mal que te fuiste de al lado de ella – le dijo a Manuel

Agus: negro! Te estoy escuchando! – gritó enojada

Los cinco rieron y después de un rato Agustina entró y se sentó a desayunar.

Bruno: te levantás siempre así de loca? – le dijo a Agustina

Agustina levantó la mirada de su taza de leche y lo miró a Bruno sin contestar

Thiago: yo que vos me callo