A un día del último día del año
ya habían comenzado a organizar todo para la noche siguiente. Agustina insistió
en que no quería nada, ni festejos ni regalos. Nada. Después de discutirle un
largo rato terminaron aceptando su decisión. Nunca le gustó festejar sus
cumpleaños y este año no iba a ser la excepción.
Para festejar año nuevo cenarían fuera
de la casa como siempre y después irían a una fiesta en una playa cercana.
Eran las dos de la tarde y hacia
demasiado calor, por lo que los seis se dirigieron a la playa. Estaba llena de
gente. Estuvieron ahí hasta cerca de las nueve de la noche y habían pasado casi
toda la tarde en el agua, por lo que estaban agotados. Querían irse a dormir lo
antes posible. Así que Oriana y Agustina se encargaron de la cena.
Después de comer Oriana estaba en
su cama leyendo, Francesca ya se había dormido y Agustina estaba en el baño. Thiago
entró a la pieza y sin decir nada se acostó al lado de Oriana.
Ori: pasa algo?
Thiago: no, vine a verte
De repente Agustina volvió del
baño
Agus: te podés ir yendo, ya la
viste.
Manu: desde la puerta también se veía,
no hacía falta que entres
Ori: vos siempre apareces en el
momento justo para unirte a ella y venir a molestar. No entiendo como hacen. Tienen
un radar, telepatía…
Thiago: o nos espían, que es lo más
probable
Manu: yo no espío a nadie, estaba
yendo al baño
Agus: y yo vengo a mi pieza y me
quiero cambiar
Thiago: bueno, está bien. Ya me
voy. – Le dijo a Agustina - Chau hermosa – dijo dirigiéndose a Oriana
Ori: Agustina sos tan mala cuando
queres. Deja de hacerle así
Agus: así como?
Ori: no te hagas que sabes de qué
te hablo
Agustina rió y después de ponerse
el pijama también se acostó a dormir
A las doce de la noche ya todos dormían.
O por lo menos eso parecía. Manuel se levantó en silencio y fue hasta la pieza
de las chicas. Se agachó junto a la cama de Agustina, que era una de las que
estaba contra la pared
Manu: Agus - susurró
Agustina lo miró de inmediato
Agus: que pasa? – dijo sentándose
en la cama
Manu: feliz cumple!
Agus: gracias – dijo sonriendo- pero
habla más despacio que se van a despertar
Manu: si mejor me voy
Manuel se puso de pie para
retirarse, pero antes de eso besó a Agustina de sorpresa y se retiró sin decir
nada y con el mismo silencio con el que entró
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